Bien dicen que son los hábitos, y no los deseos, los que hacen la diferencia en nuestras finanzas. Si, y el primer paso para generar un hábito consiste en mantener pequeñas acciones por un período consistente de tiempo. Te aseguramos que si inviertes energía, enfoque y sobre todo auto-disciplina en las siguientes recomendaciones para el manejo de tu dinero, tus finanzas mejorarán notablemente.
Primero lo primero, requieres identificar cual es el monto que actualmente generas como ingreso mensual, por ejemplo, tu sueldo, y fijarte una meta sencilla y clara, esta puede ser "Duplicar mis ingresos en un año". Es importante que conectes emocionalmente con tu meta, pues son las emociones las que te impulsarán a actuar y sobre todo a mantenerte en los pasos que te llevarán a lograrla.
Lo que viene, una vez fijada la meta, es comprometerte a administrar tu dinero según las siguientes pautas, en la medida en la que seas riguroso o rigurosa con ellas, verás los resultados.
Divide tus ingresos en 6 partes:
1) Destina el 50% de tu ingreso fijo, para cubrir tu costo de vida. Como lo lees, vive con la mitad de lo que ganas. A veces ni siquiera requieres afectar tu calidad de vida, te sorprenderá ver los gastos innecesarios que solemos realizar y que se convierten en gastos hormiga que merman silenciosamente tus finanzas. Aplica tu creatividad para simplificar gastos y gastar lo justo.
2) Invierte el 10% en tu educación y formación en finanzas. Necesitarás prepararte para esto y créeme, esto no se aprende en la universidad, destina este dinero en adquirir libros, participar en conferencias, talleres, seminarios y cualquier espacio de educación y entrenamiento que te den herramientas para que tu mentalidad crezca.
3) Separa el 10% en ahorro para tu fondo de tranquilidad. Este fondo solo puede ser destinado para cubrir deudas contraídas con anterioridad, emergencias reales no presupuestadas y sobre todo, debería ser el fondo intocable que tengas como resguardo para tu tranquilidad en situaciones difíciles.
4) Invierte el 10% en activos que te generen ingresos pasivos. Inicialmente el principal activo será tu propia educación, para que puedas luego invertir inteligentemente en negocios o activos que te permitan ganar dinero aún cuando duermas. Invertir en activos es tan importante como ahorrar, hacerlo cada mes te permitirá ganar práctica y sitiar tu cerebro en este hábito fundamental en toda persona exitosa.
5) Destina el 10% en lujos. Si quieres acceder a un estilo de vida distinto al que te alcanza actualmente, necesitas reconocer aquellas experiencias hacia las que apuntas vivir. Invertir en experiencias, regalos y momentos de confort te enseñará a celebrar desde ya aquel estilo de vida que deseas tener. Este fondo se tiene que gastar cada mes si o si, no se vale guardarlo o destinarlo en otra necesidad. Invertir en esos pequeños gustitos que mereces te dará la confianza necesaria para continuar generando estos hábitos de prosperidad.
6) Invierte el 10% restante en causas que aporten a un mundo mejor. Si quieres un mundo mejor, sé tú ese cambio que quieres ver en el mundo, identifica una causa que te apasione y busca un medio para aportar en ella, puede ser caridad, pueden ser donaciones para organizaciones de derechos humanos, puede ser apoyo directo a una familia o persona que lo requiera, qué se yo, busca alguna causa en la que te gustaría colaborar y hazlo. Verás como te sientes gratificado o gratificada y cuanto mejor manejes tus finanzas, tu aporte será más contundente. Este aporte no es negociable, una ley de abundancia es que para recibir necesitas primero dar. Si te cuesta destinar dinero al principio, dona tu tiempo, pero hazte cargo. Lo agradecerás.
Finalmente, una regla de oro para el manejo de tus finanzas: Nunca gastes más de lo que ganas. Si deseas algo que tus ingresos aún no pueden cubrir, enfoca tu energía y creatividad para incrementar tus ingresos y poder pagarlo.
Aplicar estas sencillas pautas requiere disciplina e inteligencia emocional, en el camino de instalar estos hábitos, tu mentalidad crecerá junto a tus resultados financieros.
¿Qué dices, te animas a accionar o sólo te quedarás pensando?


